Recorrí el camino del día anterior hasta Santa María del Berrocal y desde allí empezando a subir por un camino que picaba hacia arriba, pasando por los depósitos de agua que alimentan a los pueblos de la zona. Había llovido durante toda la mañana y el camino de tierra estaba bastante arenoso, costaba subir y sin conocer lo que me quedaba intente regular fuerzas metiendo un piñón bastante grande casi desde el principio.
El recorrido, sin dejar casi ningún metro de descanso transcurría entre arboles y rocas y los pocos rayos de sol que las nubes dejaban pasar hacían que sudara de verdad (y eso que estábamos a unos 5º).
La parte final se hizo larga y mas cuando la arboleda se despejo y dejo vía libre a viento que soplaba como si no quisiera que llegase.
Hice una pequeña parada en el pueblo "EL Mirón" para hacer unas fotos y acercarme a ver la iglesia (no me cruce con ningún lugareño en todo el camino).
Continué hacia arriba con mi compañero "el viento" por una pequeña senda de piedra con una pendiente que me hizo tirar de plato pequeño casi hasta la entrada, haciendo que el corazón se acelerara mas de la cuenta (menos mal que no tengo pulsómetro......), una vez arriba aproveche para hacer unas fotos del torreón, las vistas y el atardecer, percatándome de la hora que era y que se me haría de noche a la vuelta.
La bajada no la pude sacar todo el partido que me hubiera gustado ya que la luz del día empezaba a olvidarse que me quedaban unos cuantos kilómetros para llegar, haciendo el último tramo del recorrido peligroso.
Me gustaron los 24km que marco el "Sigma" de mi bicicleta, con las ganas de haber hecho la vuelta por otro sitio pero contento por haber llegado a casa .
Ya ire yo contigo a ver este paisaje
ResponderEliminarVAMOS, QUE LAS PASASTE CANUTAS.
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